Tiñendo camisetas

1. Barreño barato.
2. Gomas.
3. Tinte.
4. Guantes.
5. camisetas viejas.

Moja la camiseta con un pulverizador.

Para que te salga una espiral retuerce la camiseta desde el centro.

Haz una especie de moño y recógelo con gomas como se ve en la foto.

Bueno, ahora llega lo bueno: La pócima ésta contiene agua hirviendo, un sobre de tinte negro y un puñado de sal. Se remueve con un palito.

Se mete la camiseta. Si es blanca, os aconsejo que dejéis un poco fuera del tinte para que el resultado final sea más zarrapastroso y underground.

Vete a la bañera y allí desenrolla la camiseta y empieza a echar agua hasta que el agua deje de salir negra. Montarás una tremenda, la bañera se pondrá negra, caerán gotas por el suelo del parquet y el barreño que utilices prácticamente te quedará inservible, pero para eso, en el propio paquete del tinte te viene un producto que dejándolo durante una hora limpia todos los utensilios que hayas utilizado. Si no tienes puedes utilizar lejía.

Cuelga la camiseta en una percha y tiéndela procurando que no la de mucho el sol. Cuando esté seca la planchas. Las primeras veces que te la pongas lávala aparte.

Y yá está!! Esta estética está de plena moda. Puedes parecer una súper-pija si la combinas con enormes gafas de sol negras y pantalones de pitillo, o una drogata si te pones pantalones de chándal, o una artista de vanguardia con unos pantalones a cuadros escoceses y gafas nerd, o una fashion victim con una simple falda negra justo por encima de la rodilla con unas converse, o una gótica con unos pantalones de cuero con los morros pintados de negro y los ojos de rojo, O una hippy con falda larga hasta los pies, cinta en el pelo y una guitarrita con la que dar la brasa, o una friki si te pones pantalones cortos con chancletas...en fín...son tantas las combinaciones!!